Momentos Difíciles

La vida es toda una enmaraña de altas y bajas. Hay momentos en nuestras vidas que quisiéramos conservar para siempre, e incluso volver a vivir. Hay otros momentos que quisiéramos borrar de nuestra memoria por siempre. En general, en la vida de todo nos encontramos con momentos fáciles y momentos difíciles. 

Hoy mi familia tuvo un momento difícil, en la mañana fuimos testigos de cómo la vida iba a dejando el cuerpo de mi abuelito. Fuimos testigos de sus últimos suspiros, y todo a través de una pantalla. Fue muy difícil estar separados de esa manera y pensar que así fue la última vez que lo pude ver. Pero mientras estaba envuelta en esos pensamientos negativos, de la nada me vino un recuerdo de verdaderamente la última vez que lo vi, y me reí, en medio de toda esta deseperación me pude reir. Fue un recuerdo demasiado bueno, fue ese momento que quisiera conservar para siempre e incluso volver a vivir. 

Todos pasamos por momentos difíciles, todos tenemos días en donde la luz no se asoma por ningún lado, y los días son largos y cansados, pero en nuestros recuerdos siempre hay algo que nos puede hacer felices en un instante. En nuestros recuerdos siempre hay un momento al cual aferrarse para poder seguir adelante. Mi recuerdo estaba lleno de risas y de un amor tan puro que el Señor me permitió vivir con mi abuelito una última vez. Fue un recuerdo que el Señor me permitió volver a experimentar y aferrarme a él. 

Hoy te invito a que busques ese recuerdo y no lo dejes ir, porque ahí está Dios, en medio de toda esta batalla, sigue estando Dios y hoy tenemos la oportunidad de decirles a nuestros problemas que tenemos un gran Dios que jamás no deja solos, que tenemos un gran Dios por el que vale la pena seguir luchando.